Tijuana, Baja California, 2 de abril de 2019

Asunto: “Los fantasmas de Fernando”

Estimado Señor Sandoval

Espero que al leer esta carta se encuentre bien. Permítame presentarme, le escribe un lector de usted, alumno del “Colegio La Paz” de tercer grado de secundaria y una persona que sigue su arte.

Le expreso que al terminar de leer “Los fantasmas de Fernando” me di cuenta de que ha sido el único libro, solicitado por mi escuela, que he leído porque a mí se me antojó, a diferencia de otros tantos que son requisito para presentar los exámenes bimestrales de literatura.

Muchos libros no me gustan porque explican algo en un par de hojas, cuando perfectamente bien lo pudieron haber explicado en un par de párrafos. Cuando le digo esto se lo digo en serio. Sí, admito que el principio estuvo algo lento porque tardó en presentar la verdadera trama, de acuerdo al título, pero se compensó al final cuando el lector se da cuenta de quién es verdaderamente el pelón y que éste es un fantasma.

Confieso que cuando empecé a leer solamente pasaba las páginas, pero conforme fui avanzando me di cuenta de que todo era importante, así que me regresé para leer con cuidado cada detalle.

Cuando alguien lee con atención va descubriendo poco a poco lo que revela la verdadera historia, el lector se engancha y hace que quiera terminar el libro, eso me pasó a mí. Es una de las cosas que más disfruto como lector, cien páginas de misterio para que se conviertan en una revelación muy importante, como lo fue toda la doble historia de Fer y su papá, explicar su relación y también presentar a su abuelo ¡que terminaría siendo el bigotón! y que sin él no hubiera existido una de mis tramas favoritas de esta obra.

Otra de las razones por la cual me gustó este libro fue que estuvo perfectamente explicado. No fueron cien páginas de aburrimiento explicando el hotel en Los Sabinos, al contrario, dio una descripción breve pero exacta, lo que se tenía que decir, pero de una manera rápida para que la historia siguiera y que el lector no se aburriera; que supongo que es uno de los problemas más difíciles de un escritor. ¿Cómo hacer que un lector no se aburra y que disfrute el libro, pero al mismo tiempo tenga la información necesaria para írsela imaginando? En esta novela se nota la experiencia de usted como autor, que hizo que la historia siguiera, como sea que fuera, pero que siguiera.

Al terminar el libro me di cuenta de que no me identifiqué con ningún personaje, ya que no he vivido experiencias como la de Fernando, por lo que verdaderamente me siento agradecido, creo que nadie quisiera vivir las experiencias de Fer, sin embargo lo que sí me pasó fue conectarme con él y con lo que sentía, cuando algo le hacían tenía ganas de reclamarle a quien se lo hizo, ya que me cayó bien el personaje; pero al momento de gritarles caía en cuenta de que es un libro, que no me escuchan y que parezco loco gritándole a un libro.

Me impresionaron las habilidades que tiene como autor, la manera en que está narrada la historia es muy fácil de entender y es muy impredecible, como en el momento de la revelación del pelón. La mayoría de mis compañeros no habían previsto ese resultado. Ese cambio drástico e inesperado fue algo muy divertido y cautivador.

Algo muy importante en este libro es que no tiene incoherencias, usted demuestra su experiencia como escritor al elaborarlo muy bien, además de hacerlo muy divertido. También se me hizo llamativo el escenario de la historia, el hotel en bancarrota, así como el señor que esperaba su muerte y la oportunidad de que su hijo lo viera y le darle su herencia correspondiente.

Yo recomiendo mucho este libro a gente que le gusta leer sobre misterio y un poco de problemas, a quienes les gustan libros que describen escenarios con palabras claves y breves, libros que si los lees rápido, los tengas que leer una segunda vez para disfrutar de la prestigiosa obra de arte del autor.

            Gracias por hacer mi ciclo escolar más interesante con esta novela.

Se despide de usted

Bobby Ben